Guatemala, 24 de junio de 2025.  El titular de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (SEGEPLAN), Carlos Mendoza, destacó la importancia de la prospectiva, es decir la construcción de escenarios a futuro, en la elaboración del Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado, y en particular para el del 2026 que actualmente se elabora.

Junto al ministro de Finanzas Públicas, Jonathan Menkos, Mendoza inauguró el Taller Planificación, Escenarios Prospectivos y Marco Fiscal de Mediano Plazo, en el marco del ejercicio Planificación y Presupuesto Abierto 2026, fase II, “Tu propuesta, nuestro compromiso”.

El Secretario de SEGEPLAN indicó que los escenarios prospectivos son un insumo necesario para la planificación y para el presupuesto, y que la capacidad de una administración pública para elaborar escenarios a futuro es crucial no solo para la sobrevivencia de la administración, su legitimidad y la gobernabilidad que puede generar, sino de la sociedad misma.

La Subsecretaria de Planificación, Wendy Sánchez resaltó la importancia de que este año en el ejercicio de Planificación y Presupuesto Abierto se empiece a hablar de planificación prospectiva a largo plazo.

Tradicionalmente en la formulación de los presupuestos en Guatemala se toman solo dos variables: las proyecciones de recaudación tributaria que da la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) y, a partir de esa recaudación, la tasa de crecimiento económico. De esta forma, se estiman los techos presupuestarios.

Sin embargo, es necesario visualizar cuales son los escenarios a futuro a los que debemos responder con los recursos de hoy. “Esta diría yo es la tercera variable a considerar, la variable de la incertidumbre, porque mucho de lo que está a futuro tiene un alto porcentaje de incertidumbre”, indicó Mendoza.

Refiriéndose a la situación que se vive a nivel del mundo, señaló que “ahora la variable que todos quisieran tener en la bola de cristal es cuál va a ser el precio del barril de petróleo de aquí a 6 meses, de los fertilizantes, del transporte y cómo eso afecta a la canasta básica alimentaria”.

Herramientas esenciales

Por su parte, el ministro de Finanzas Públicas, Jonathan Menkos, señaló la importancia de reflexionar con seriedad, con evidencia y convicción de largo plazo, sobre “cómo hacemos que todas estas variables casen en un elemento vital que es el proyecto de presupuesto de cada año y en particular el del año 2026”. Los presupuestos necesitan pasar por el esfuerzo de la planificación para tener el mejor sentido posible, acotó.

Añadió que la planificación y el presupuesto abierto no solo son conceptos técnicos sino herramientas esenciales para garantizar que cada quetzal que llega a las arcas públicas se convierta en desarrollo, en democracia, se traduzca en una utilización inteligente, responsable y con visión de futuro en beneficio de toda la sociedad.

Especialistas de SEGEPLAN participaron activamente en este taller, para apoyar e identificar la ruta de la planificación – presupuesto.

También consideró que la planificación y los escenarios prospectivos “nos permiten anticipar retos y oportunidades y entender hacia dónde debemos caminar en el próximo año, pero también en los próximos cinco años”.

En ese contexto, el equipo de SEGEPLAN, por medio de Heidi López, de la Dirección de Análisis Estratégico del Desarrollo, realizó una presentación sobre planificación y escenarios prospectivos, que incluyó el marco teórico y los fundamentos de la prospectiva y expuso un ejemplo de cómo esta metodología se puede utilizar para el abordaje del tema de la seguridad alimentaria y nutricional.

Importancia de la evidencia

Wendy Sánchez, subsecretaria de Planificación y Programación de SEGEPLAN, destacó la importancia de que este año en el ejercicio de Planificación y Presupuesto Abierto se empiece a hablar de planificación prospectiva a largo plazo. “Esto es necesario hacerlo con datos recientes, como que más del 50% de la población se encuentra en pobreza. Es preciso retomar esa metodología de planificación y presupuesto que nos llama a la evidencia”, señaló.

La funcionaria indicó que ya no se debe seguir planificando y presupuestando en una lógica incremental del 5%, del 10% cada año, sino se tiene que ver rutas claras, definidas y desde las necesidades del territorio, de cada una de sus problemáticas.

“Ya tenemos datos que nos han arrojado los mapas de pobreza, el censo de talla recientemente publicado de escolares de primer grado 2024, tenemos identificados los departamentos y los municipios más pobres del país. Entonces debemos revisar los programas que estamos ejecutando actualmente y los planes, y redireccionar las intervenciones y los recursos hacia la atención de brechas”, comentó.

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Dirección de Comunicación Social

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